Vuelve la lluvia enfundada en su húmedo abrazo. Penetra a través del aire en los pulmones y murmura su sutil sortilegio de vida, cambio, despertar. Me siento pluma en mitad de una tormenta. Siento que mi voz se ha convertido en murmullo que golpea contra las hojas y la tierra, que perece en el agua como una parte de mí, perece en la sombra. Siento que debo callar y aguardar al silencio. Divago en la duda de un mañana, ya que el sol se ocultó para siempre. Confío y guardo silencio por temor a mi espectro, ese fantasma que traicionó una a una las células de mi cuerpo y se convirtió en mi enemigo; voraz, arrogante... tan distante, malhumorado y estúpido, que ahora sólo actúa como una sombra más que perdió el sentido de su propia existencia, tan insignificante, que ni siquiera la Nada la impregna. Aquí estoy con mi propia cordura doblegada. Sometida al descenso de mis recuerdos marchitos, a ese sabor amargo que nunca liberará a mi alma. Ahí está la razón de todo y la causa de la lluvia. La tristeza y la muerte se apoderan de mis venas, quebrando la belleza de un paisaje en ruinas con el triste gemido de un poema que nunca conocerá el verso.
5 comentarios:
Hay poemas que nunca conocerán el verso, pero esos poemas habitan para siempre en la célula primigenia donde el alba cubre la Nada de un silencioso destello dorado de sabiduría.
Besos
Siempre sabes qué decir para sacarme una sonrisa ^^
Ya era hora de que volviera algo que verdaderamente es mio.
Besos negra xD
Tan devastador que voy a seguir leyéndote.
Me parece que ambos hemos estado haciendo eso y con ganas! xDD
Me ha encantao curiosear tu blog ^^
defenestrado sentir..
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